Estrategia de liderazgo en costes mediante ingeniería de costes

¿Qué es una estrategia de liderazgo en costes?

Ofrecer productos a los precios más bajos posibles es un método para aumentar la cuota de mercado y mantener una ventaja competitiva. Las empresas que son capaces de mantener sus precios por debajo de los de sus competidores tienen una clara ventaja. Para capitalizar esta ventaja, es crucial desarrollar una estrategia de liderazgo en costes.

La estrategia de liderazgo en costes significa que una empresa es líder en la categoría de bajo coste. Para lograrlo con éxito sin afectar significativamente a las ventas, una empresa debe reducir costes en todos los demás ámbitos, como el marketing, las ventas y el envasado. Una estrategia de liderazgo en costes pretende que una empresa se convierta en el líder en costes de su sector o mercado.

Ser líder en costes tiene muchas ventajas. Una de ellas es que pueden aplicar los precios más bajos a sus productos sin dejar de ser rentables. A diferencia de otras empresas, los líderes en costes pueden capear mejor las recesiones. Esto se debe a su experiencia en responder a consumidores sensibles a los precios. Además, las empresas líderes en costes son más flexibles y, por tanto, pueden conceder descuentos o probar otras ofertas de productos con más frecuencia.

Diferencia entre guía de costes y guía de precios

Líder en costes describe a una empresa que tiene los costes de explotación más bajos. Líder en precios significa que una empresa tiene los precios más bajos. A menudo, una empresa líder en costes es también líder en precios.

Una empresa que se esfuerza por alcanzar el liderazgo en precios a veces opta deliberadamente por ofrecer los precios más bajos, aunque ello suponga una menor rentabilidad. Por ejemplo, los grandes minoristas en línea venden determinados productos con pérdidas o con un margen de beneficio muy bajo para mantener los precios más bajos y captar así una mayor cuota de mercado. Estas empresas se consideran líderes en precios, pero no en costes.

Algunas empresas pueden tener costes de explotación más bajos y optar por vender sus productos con márgenes más altos para obtener más beneficios. Estas empresas se consideran líderes en costes, pero no líderes en precios. Sin embargo, es habitual que el liderazgo en precios y el liderazgo en costes coincidan en el caso de una empresa que produce al coste más bajo al tiempo que ofrece los precios más bajos de su categoría.

¿Cómo convertirse en líder en costes?

El crecimiento de una empresa puede reforzar considerablemente su capacidad para convertirse en líder en costes. Los costes de producción pueden reducirse mediante el escalado, es decir, comprando mayores cantidades de materiales a precios más favorables. Esto no sólo conduce a mejores condiciones de compra, sino también a una posición negociadora más fuerte con los proveedores. Además, la ampliación hace que una empresa sea más resistente a la competencia, ya que le proporciona opciones de precios más flexibles y una mayor presencia en el mercado. En sectores muy competitivos, esto puede permitir ofrecer precios que la competencia no puede rebajar y, al mismo tiempo, asegurarse una mayor cuota de mercado sin crear escasez de existencias.

Invertir en tecnologías avanzadas puede ayudar a las empresas a ser líderes en costes. Las soluciones informáticas existentes también pueden ayudar a ahorrar costes y optimizar los procesos minimizando los errores y reduciendo las necesidades de personal. La adquisición directa de materias primas puede reducir los costes operativos al evitar los recargos de los proveedores. También abre la posibilidad de revender los excedentes de materias primas a otras empresas, generando así ingresos adicionales.

Una mayor eficiencia puede suponer para las empresas un considerable ahorro de costes. Por ejemplo, el uso de software puede reducir el número de empleados necesarios, lo que disminuye los costes laborales. Los tiempos de producción más rápidos también permiten cobrar precios más altos por los servicios acelerados, al tiempo que se reducen los costes operativos, como la electricidad. La mejora de la eficiencia también puede lograrse en la producción en masa. Por ejemplo, si una empresa aumenta los volúmenes de producción mediante la optimización de procesos o el uso de nuevas tecnologías, puede reducir considerablemente los costes unitarios y aumentar así la rentabilidad.

Limitar los productos y servicios es otra estrategia para convertirse en líder en costes. Cuando una empresa reduce el número de productos que fabrica y vende, puede centrarse más específicamente en unos pocos productos o servicios especialmente rentables. Esto facilita y hace más probable que la empresa amplíe sus operaciones al tiempo que obtiene los precios más favorables para las materias primas y otros suministros.

¿Cómo desarrollar una estrategia de liderazgo en costes?

Hay 4 pasos para desarrollar una estrategia de liderazgo en costes.

Es esencial conocer los costes exactos de material, mano de obra, administración y software que intervienen en la producción. Hay que añadir los costes que puedan pasarse por alto. Esto permite analizar los procesos existentes.

Para optimizar sus propios procesos, es importante analizar a fondo a sus competidores. Recopilando información sobre sus procesos y costes, una empresa puede obtener información valiosa y mejorar sus propios procesos, incluso sin convertirse ella misma en líder en costes.

Por último, hay que identificar estrategias para reducir costes y elaborar planes concretos de aplicación. Entre ellas pueden figurar mejores negociaciones con los proveedores, mayores cantidades de pedidos o la integración de nuevas tecnologías.

Al aplicar estrategias de reducción de costes, los directivos de las empresas deben asegurarse de que los progresos se miden y supervisan periódicamente. Como el liderazgo en costes es un proceso continuo, muchas empresas repiten estos pasos a intervalos regulares.

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